El héroe australiano trata de proteger a su novia norteamericana de unos gángsters neoyorquinos que la persiguen. La única manera de vencerlo es trasladarlos al terreno que mejor conoce Dundee, Australia.

En la jungla sudamericana, un hombre propietario de plantaciones decide casarse por correspondencia para tener un hijo que herede su obra. Pero la mujer tendrá que enfrentarse a la brusquedad del marido y a las costumbres de los nativos.

Un viejo bucanero vive escondido en la posada de Ben Bow. El filibustero guarda en un baúl un valioso plano que indica el lugar exacto donde se oculta el tesoro de las innumerables andanzas del pirata Flint. El malhechor muere y la localización del botín, que buscan muchos aventureros, va a parar a manos del pequeño Jim Hawkins, hijo del dueño del hospedaje.

Seis meses después de que la escritora Joan Wilder y el aventurero Jack Colton partieran en romántico crucero alrededor del mundo, vuelven a enfrentarse a la aventura. Por un lado deberán hacer frente a los retos de una relación estable, descubriendo que no todo es del color de rosa de las novelas de Wilder, y por otro lado se verán involucrados en una trepidante persecución de repercusiones increíbles que los llevará a atravesar numerosos obstáculos en medio del desierto africano.

La vida de Joan Wilder, famosa novelista neoyorquina, está a punto de convertirse en una aventura apasionante. Su hermana Elaine ha sido secuestrada en Colombia y sólo será liberada si Joan entrega a los secuestradores el mapa de un tesoro que ella, sin saberlo, posee. Joan tendrá que superar todo tipo de obstáculos y peligros como si de una de sus novelas se tratara... En medio de este caos, aparece Jack Colton, un mercenario que sólo trabajaba por dinero, pero que se convierte en el valiente héroe con el que Joan siempre había soñado.

Un grupo de médicos es miniaturizado e introducido en el interior de un cuerpo humano para realizar una peligrosa operación quirúrgica que salve su vida.

El capitan Wyller, un aventurero experto en los mares de China, recibe un insólito encargo: llevar a Hong Kong, liberándole de la hegemonia comunista, a todo un poblado -doscientas personas-, en un descabellado viaje en un viejo y destartalado remolcador a través del fatídico "callejon sangriento": las trescientas millas del estrecho de Formosa. Wyller acepta el desafio, que acabará convirtiéndose en una dramática, angustiosa peripecia, en la que muchos perderán la vida.

Tras ser detenido robando en su propia joyería, la policía descubre que el acusado está siendo extorsionado por un hombre que mantiene a su esposa secuestrada. El agente William Stantin logra acorralar al criminal en los bosques del norte de los Estados Unidos, pero debido a su inexperiencia en ese tipo de entornos naturales, recurrirá al apoyo del agente Jonathon Knox para dar caza al peligroso sospechoso.

Unos supuestos indios pieles rojas roban un pony, un caballito mandado por el embajador del Japón. Una nota de Machaco, jefe de los apaches, informa de que si no ha recibido un millón de dólares antes de cuatro días, el pony morirá. El cónsul japonés pone el millón a disposición del banquero Butler. Para transportar un arquita conteniendo un millón de dólares confían la misión al más pundonoroso, honrado e infeliz Sheriff del condado, Jack el Negro. Pero el arquita con el millón se ha convertido en una obsesión para un simpático y audaz bandido conocido por El Suizo. También interviene en el asunto un japonés llamado Sakura, cuidador del pony. El Suizo, Jack el Negro y Sakura juntan sus fuerzas para rescatar el pony. Cuando llegan al poblado de Machaco se enteran de que Machaco nada tiene que ver con el asalto al tren, realizado por un grupo de blancos disfrazados de indios, y que el arca no contiene dinero, sino una carga de dinamita que hará volar en pedazos al que la abra. Todo esto ha sido tramado por Butler, que manda a un grupo de renegados.

Tras la muerte de su madre, Sarah se traslada a vivir a la granja de su padre, al que apenas concoe. A Sarah le entusiasman los animales y por ello no le cortaría nada adaptarse a su nueva vida. Una mañana, mientras pasea a caballo, Sarah ve en el bosque un precioso caballo blanco y poco después conoce a Fergus, un anicano que vive solo y cuida de los animales heridos por las trampas de los cazadores furtivos. Sarah recuerda una vieja historia que su madre le contaba cuando era pequeña antes de dormir: la leyenda del caballo y la princesa.