Marlon Brando y Jack Nicholson sólo trabajaron juntos en esta ocasión, pero son auténtica dinamita, dando explosiva intensidad a este western clásico e increíblemente realista del director Arthur Penn (Pequeño gran hombre).David Braxton (John McLiam), un ranchero de las “Badlands”, de Montana, es un hombre que se ha hecho a sí mismo. Años de esfuerzo incansable y sobrehumana determinación han transformado las vastas y ásperas tierras de la región en un próspero imperio. Por eso, cuando su fortuna -e incluso su familia- se ven amenazadas por un despiadado ladrón de caballos (Nicholson), Braxton decide tomarse la justicia por su mano, y contrata a un sádico ªjusticieroº (Brando) para que atrape al cuatrero. La intención de Braxton era librar al territorio de una amenaza, pero en lugar de eso, lo que hace es poner en marcha una compleja serie de acontecimientos de una brutalidad y un salvajismo que no hubiera podido tan siquiera imaginar. filmada enteramente en el Missouri, majestuoso estado de Montana con la participación de Randy Quaid y Harry Dean Stanton y un guión de Thomas McGuane, es un film tan poderoso y vibrante como sus dinámicos protagonistas.

Tras asaltar el banco de una pequeña localidad mejicana fronteriza, dos forajidos -Kid y Ded- emprenden la huida. Acorralados por los guardias rurales, Ded escapa con el botín, abandonando a su compañero, que es detenido. Tras cinco años de reclusión, Kid localiza en la localidad de Monterrey, cuyo banco pretende atracar, a Ded, que ostenta el cargo de sheriff. Ded es ya otro hombre. Ha formado una familia, ganándose el respeto de sus convecinos, a los que no ha ocultado su borrascoso pasado.