En el transatlántico Poseidón, uno de los hoteles flotantes mejor equipado, se ve sorprendido por una ola gigantesca, provocando una catástrofe en la que la nave vuelca. Los pasajeros supervivientes vivirán una odisea, atrapados en la enorme estructura y totalmente desorientados por la posición de ésta.

En el año 1997, el detective lugarteniente Mike Harrigan libra una cruenta batalla contra los narcotraficantes y sus violentas bandas que asolan las calles de Los Ángeles. Habiendo perdido hombres y armas, Harrigan y su equipo están perdiendo el control de las calles. De repente, algo terrible e inexplicable empieza a acontecer. Uno por uno, los reyes de la droga son asesinados por un adversario misterioso y terrorífico, silencioso, invisible, invencible, que ataca con una ferocidad inusitada y un poder posiblemente sobrenatural. Harrigan sale para traer a su desconocido y brutal asesino a la justicia, hasta que se da cuenta que él y su banda son ahora los perseguidos. El depredador ha empezado a perseguir y matar a la policía. Ellos pasan así a convertirse en el siguiente gran juego del sanguinario alienígena. Al mismo tiempo, una fuerza federal para trabajos especializados, encabezada por el Agente Federal Peter Keyes llevan a cabo su propia investigación, y han ordenado a la policía que se quite de en medio.

La película se centra en el Capitán Malcolm Reynolds, un veterano de la Guerra Civil de las Galaxias, que ahora pilota la nave Serenity. Cuando Malcolm acuerda transportar a un joven doctor y a su inestable y telepática hermana, pronto se da cuenta que va a tener más problemas de los que creía cuando descubre que ambos pasajeros son fugitivos de la Alianza, la coalición que gobierna la galaxia, y que no van a detenerse hasta dar con ellos. La Serenity se ve en medio de una batalla entre las imparables fuerzas militares y los Ravers, salvajes bárbaros que vagan por los bordes del espacio.