En el año 1997, el detective lugarteniente Mike Harrigan libra una cruenta batalla contra los narcotraficantes y sus violentas bandas que asolan las calles de Los Ángeles. Habiendo perdido hombres y armas, Harrigan y su equipo están perdiendo el control de las calles. De repente, algo terrible e inexplicable empieza a acontecer. Uno por uno, los reyes de la droga son asesinados por un adversario misterioso y terrorífico, silencioso, invisible, invencible, que ataca con una ferocidad inusitada y un poder posiblemente sobrenatural. Harrigan sale para traer a su desconocido y brutal asesino a la justicia, hasta que se da cuenta que él y su banda son ahora los perseguidos. El depredador ha empezado a perseguir y matar a la policía. Ellos pasan así a convertirse en el siguiente gran juego del sanguinario alienígena. Al mismo tiempo, una fuerza federal para trabajos especializados, encabezada por el Agente Federal Peter Keyes llevan a cabo su propia investigación, y han ordenado a la policía que se quite de en medio.

John MacClane, un duro policía neoyorquino, acude a Los Angeles para pasar unos días de vacaciones con sus hijos y su esposa Holly. En el transcurso de la fiesta navideña que la empresa de Holly da en el moderno edificio Nakatoni, éste es asaltado por un supuesto grupo terrorista liderado por un megalómano llamado Hans Gruber.

AEs Navidad y el teniente John McClane del Departamento de Policía de Los Angeles espera en el aeropuerto Dulles de Washington que aterrice el avión en el que viaja su esposa.

Simon, un astuto terrorista, hace estallar una bomba en un centro comercial y revela la existencia de más explosivos. El detective John Molano ayudado de un héroe anónimo buscan frenéticamente los artefactos hasta darse cuenta de la trampa que les han tendido.