Aclamada por la crítica internacional y con un excelente reparto, la brillante epopeya de Stanley Kubrick sobre la guerra de Vietnam narra el proceso de deshumanización que va transformando al ser humano en cualificados asesinos entrenados para matar, Matthew Modine, Adam Baldwin, Vincent D’Onofrio, Dorian Harewood y Arliss Howard, protagonizan a los nuevos reclutas sumidos en el infierno de un régimen militar donde deben superar un período de instrucción brutal. Hartman, sargento mayor de artillería, encarna a un implacable instructor quien vocifera, insulta y humilla a sus reclutas dentro de unos márgenes de violencia atroz. Un retrato feroz y cáustico, realista y humano del riguroso aprendizaje de un puñado de marines destinados a combatir el Vietnam. La acción es salvaje, la historia prodigiosa, los diálogos se clavan con una dureza impactante. La Chaqueta Metálica, con su narración desde los comienzos del adiestramiento y su técnica para embrutecer a sus hombres hasta la pesadilla vivida en la batalla de Hue, ha sido calificada como un triunfo cinematográfico.

Una compañía de infantería del ejército americano durante la Segunda Guerra Mundial se enfrenta a una batalla crucial en Guadalcanal, un momento clave que no sólo determinará la continuidad del conflicto bélico sino que les cambiará la vida, a los que sobrevivan, para siempre.

Michael es un joven viviendo al filo de la navaja. Alcohólico y cocainómano, ahora intenta rehabilitarse mediante un programa en grupo. Además espera un hijo con su mujer y tiene un trabajo como dependiente en el turno de noche de una gasolinera que parece que va a llevarle a la locura. Su vida pende de un hilo hasta que conoce a Stuart Chappell, un misterioso escritor que le rescatará durante unas horas de su miserable ruina y que además parece saber todas las respuestas a sus preguntas. Pero las respuestas le conducirán a la tentación y la tentación le lanzará a una espiral cada vez más oscura y sin salida. En el laberinto nocturno de Los Ángeles, Michael se encontrará con los más bajos instintos, la violencia, la anarquía y las perversiones más cruentas y malsanas, hasta que se da cuenta que no puede luchar contra el mismo diablo.

Después de la gran victoria de los indios en una lucha contra la columna del general Custer, deciden unirse todas las tribus, reconquistar las tierras que pertenecieron a sus antepasados y expulsar para siempre a los odiados "rostros pálidos", a quienes han perdido todo el temor.

Su delito, ser inconformista. Su sentencia, trabajos forzosos. Paul Newman interpreta a Luke en uno de sus papeles más memorables en La Leyenda del Indomable, un personaje solitario que no puede o no quiere conformarse con las normas arbitrarias de su cautividad. Recuerda a alguna de las otras interpretaciones destacables de Newman. Luke es El buscavidas sin ansias de victoria, Harper sin una misión moral, Hud sin un padre al que desafiar. “Dale un buen guión a un actor y será capaz de mover el mundo” dijo Newman cuando proclamó que La Leyenda del Indomable era uno de los mejores guiones que había leído en mucho tiempo. “Luke es una persona distante e indiferente, pero no puede con el sistema del que se mofa”. Hay un buen motivo para la autenticidad del guión: el coautor Donn Pearce pasó dos años de su vida haciendo trabajos forzosos. Un reparto de selectos personajes, con George Kennedy en el papel de Dragline, ganador† de un Premio de la Academia®, escoltan magistralemente en el papel de compañeros de prisión a Newman. Strother Martin es el capitán que pincha a Luke con su famosa frase “Lo que pasa aquí es que… falta comunicación”. No falta nada. Con un humor vibrante y una enérgica manera de narrar la historia, La Leyenda del indomable es todo un éxito.