El guapo Chance Wayne nunca alcanzó el estrellato que ansiaba en Hollywood, pero siempre fue una estrella entre las damas. Ahora, de vuelta a su aletargada y bochornosa ciudad natal de Gulf Coast, se ha involucrado con dos de ellas: una reina del cine acabada y desquiciada por las drogas y el vodka, y la chica que un día abandonó. Paul Newman, la nominada al Oscar® a la Mejor Actriz Geraldine Page, Rip Torn y Madeleine Sherwood recrean sus papeles en el escenario, junto a Ed Begley, ganador de un Oscar® en el papel del jefe político corrupto de la ciudad, en esta brillante versión del éxito de Broadway de la obra de Tennessee Williams. Sexo. Dinero. Hipocresía. Chantaje económico y emocional. Estos elementos familiares en el terreno literario de Williams se combinan a la perfección con la lucha que Chance mantiene contra sus demonios, en un intento desesperado por redimir su vida perdida y recuperar su dulce pájaro de juventud..

El legendario Paul Newman encabeza el brillante reparto de esta formidable película, un thriller que aúna grandes estrellas con el mejor suspense. Newman es Harry Ross, detective privado ya retirado que se presta a ayudar a unos antiguos amigos, una pareja de actores famosos de Hollywood. Pronto Ross se verá envuelto en una peligrosa y complicada intriga criminal. Una historia sobre seres privilegiados o de mala reputación, repleta de verdades y engaños, de sexo y desesperación, “que se paladea como el buen vino”.

Donald Sullivan, un trabajador de la construcción, es un sexagenario que se niega a crecer y continúa tan animado, adulador y rebelde como de joven. Sully tiene graves problemas económicos y ha puesto un pleito a un constructor de la ciudad que le debe dinero.

El doctor Armstrong, un joven científico americano experto en balística nuclear, aparentemente acaba de traicionar a su patria vendiéndose a los alemanes del Este. Su novia y secretaria, Sarah, le ha seguido en la deserción. El motivo de esta huída ha sido el menosprecio de las autoridades norteamericanas a un tipo de cohete que el científico tenía en fase de experimentación. En el diseño de este cohete faltaba algo que sólo otro científico, un alemán que trabaja para los rusos, sí ha conseguido. Junto a este hombre permanecerá Armstrong el tiempo suficiente para hacerse con aquellos conocimientos que le faltaban.