Paul Kersey es un famoso arquitecto que vive con su familia en Nueva York. Un día unos matones asesinan a su mujer y violan a su hija, que a duras penas sobrevive. Traumatizada por el brutal ataque, la niña permanece en un hospital psiquiátrico en estado vegetativo. En un principio su padre confía en que la policía resuelva el caso, pero pronto se da cuenta de lo poco que ésta puede hacer. Entonces, por primera vez en su vida, Kersey, pacifista hasta la médula, siente cómo va invadiéndole el deseo de venganza. Un día, cuando él mismo es atacado y dispara contra su agresor en defensa propia, toma una decisión sobre su futuro. No sólo resuelve protegerse a sí mismo, sino que además se erige en el vengador de Nueva York, ciudad en la que va a causar estragos entre el mundo criminal.

Poco después del desembarco aliado en Normandia, Kelly captura a un comando alemán que conduce a su cuartel general, en las cercanías de Nancy. Emborrachando a los alemanes, consigue saber que uno de ellos es el encargado de llevar a su país un cargamento de oro que se encuentra guardado en el Banco de Claremont.